“Invitando” al Estado a desayunar
Con respecto a una nota replicada en Revista Júpiter, titulada The Political Economy of Government Employee Unions, que me pareció un excelente artículo, de esos que por decir las cosas como son, se hacen muy poco populares. Y como me suele suceder, al dejar un comentario el citado post, me vino la idea de escribir uno propio, por lo que me basaré en lo que ya dije.
Ahora si bien el foco del artículo es el problema que enfrenta el Estado de Wisconsin en USA, pero es perfecto ejemplo de lo que sucede con las burocracias estatales de todos lados, esto es una suma de situaciones que por separado no son un gran problema, pero al unirse crean una sinergia negativa que nos termina afectando a todos, al o bien deteriorar nuestra calidad de vida, o en nuestro caso, ralentizar o paralizar por momentos el desarrollo de nuestra sociedad (digo por momentos, por que en el fondo soy un tarado optimista):
1. Gastos estatales en constante crecimiento, en función tanto de mejoras a las condiciones laborales de las burocracias, como aumento de los gastos sociales, y la carga burocrática asociada a dichos gastos sociales (no se haga ilusiones, que de cada 10 pesos de beneficios sociales, una buena parte se la come el propio Estado, o los amigos de los funcionarios del Estado, acuérdese de las EGIS).
2. Aumentos en las cargas impositivas de personas y empresas (si le suben los impuestos a las empresas ¿quién cree las termina pagando? No sea ingenuo, lo hace Ud., por que le subieron el precio a sus productos o servicios, o disminuyeron la calidad de la atención, ¿qué no le gusta, que no es justo?, no sea hipócrita, si fuera su empresa eso es lo que Ud. haría).
3. Incremento de la ineficiencia administrativa del Estado, bien por negligencia, corrupción o mera incompetencia personal de los agentes del Estado (seamos claros, si digo dolo, me refiero a jarrones perdidos, desmalezados de refinerías, transantiago o tran-chanta-smog-tiago, sobresueldos en sobres sin nombre, etc.).
Uno de los problemas de los políticos profesionales, es que están mirando siempre la próxima elección, eso causa una mediocridad en la búsqueda de soluciones a los problemas estructurales de los estados, no puede realizarse una planificación adecuada, pues siempre el cálculo electoral supera las necesidades de largo plazo. Ahora bien, lo divertido, es que si un grupo político, de forma concertada y bien planificada, eliminara la grasa del Estado (cualquier Estado), mejoraría en corto tiempo el bienestar general al disminuir las cargas impositivas directas e indirectas, mejorando sus expectativas electorales y estableciendo un paradigma ideológico en la sociedad no reversible, en función de un menor nivel impositivo, y mayor rigurosidad en el gasto, en leguaje más simple, más dinero en el bolsillo de los ciudadanos, menos derroche en la burocracia estatal.
En este país, se ha vendido el discurso que “pagar impuestos”, solo lo hacen las empresas y aquellos que tienen altos ingresos y realizan la declaración de renta, o sea de forma más técnica, impuestos de primera y segunda categoría, lo que es FALSO, en este país TODOS pagamos impuestos, que se pueden comer de partida MÁS del 30% de su ingreso bruto, aunque a Ud. le parezca difícil de creer ¿por qué?, bueno vamos contando:
1. Primero tenemos el IVA, el más conocido.
2. Pero debemos agregar el impuesto específico a los combustibles que TODOS pagamos, bien sea cargando combustible en los autos, pagando un pasaje, o pagando un kilo de pan… pues en el precio que Ud. paga.. ¡ADIVINE!.. está incluido el impuesto específico a los combustibles, por el transporte de los productos, o la propia preparación de este.
3. Luego el impuesto de timbres y estampillas.
4. El de contribuciones.
5. Los impuestos municipales.
6. Los impuestos específicos al tabaco.
7. A las bebidas alcohólicas, etc.
Con la correspondiente sinergia de los mismos, ¿y quien cree que termina pagando todos esos impuestos?, ¿algún pobre diablo que no se ha puesto a pensar en esto? pues es correcto, es USTED, y todos los demás los que pagamos la fiesta ¿ahora se ha puesto a pensar cuanto cuesta en verdad un kilo de pan? ¿quiere calcularlo?, apuesto que nunca imagino que cada mañana Ud. invita al Estado a desayunar, y ¿le dieron alguna vez las gracias?
La próxima vez que vea una protesta bien por más “beneficios” que pague el Estado o huelgas de empleados públicos, buscando más beneficios, tome aire, piense un poco, PIENSE (no duele ni toma mucho tiempo, y que Yo sepa ni mata ni mutila), y por favor ¡¡¡ACUERDESE QUE UD PAGA!!!, apuesto que ya no verá de forma tan simpática cada protesta.
Una frase para terminar, siempre recuerde que:
“LA POLITICA NO LUCHA POR TU ALMA, LUCHA POR TU BOLSILLO”.
Ahora si bien el foco del artículo es el problema que enfrenta el Estado de Wisconsin en USA, pero es perfecto ejemplo de lo que sucede con las burocracias estatales de todos lados, esto es una suma de situaciones que por separado no son un gran problema, pero al unirse crean una sinergia negativa que nos termina afectando a todos, al o bien deteriorar nuestra calidad de vida, o en nuestro caso, ralentizar o paralizar por momentos el desarrollo de nuestra sociedad (digo por momentos, por que en el fondo soy un tarado optimista):
1. Gastos estatales en constante crecimiento, en función tanto de mejoras a las condiciones laborales de las burocracias, como aumento de los gastos sociales, y la carga burocrática asociada a dichos gastos sociales (no se haga ilusiones, que de cada 10 pesos de beneficios sociales, una buena parte se la come el propio Estado, o los amigos de los funcionarios del Estado, acuérdese de las EGIS).
2. Aumentos en las cargas impositivas de personas y empresas (si le suben los impuestos a las empresas ¿quién cree las termina pagando? No sea ingenuo, lo hace Ud., por que le subieron el precio a sus productos o servicios, o disminuyeron la calidad de la atención, ¿qué no le gusta, que no es justo?, no sea hipócrita, si fuera su empresa eso es lo que Ud. haría).
3. Incremento de la ineficiencia administrativa del Estado, bien por negligencia, corrupción o mera incompetencia personal de los agentes del Estado (seamos claros, si digo dolo, me refiero a jarrones perdidos, desmalezados de refinerías, transantiago o tran-chanta-smog-tiago, sobresueldos en sobres sin nombre, etc.).
Uno de los problemas de los políticos profesionales, es que están mirando siempre la próxima elección, eso causa una mediocridad en la búsqueda de soluciones a los problemas estructurales de los estados, no puede realizarse una planificación adecuada, pues siempre el cálculo electoral supera las necesidades de largo plazo. Ahora bien, lo divertido, es que si un grupo político, de forma concertada y bien planificada, eliminara la grasa del Estado (cualquier Estado), mejoraría en corto tiempo el bienestar general al disminuir las cargas impositivas directas e indirectas, mejorando sus expectativas electorales y estableciendo un paradigma ideológico en la sociedad no reversible, en función de un menor nivel impositivo, y mayor rigurosidad en el gasto, en leguaje más simple, más dinero en el bolsillo de los ciudadanos, menos derroche en la burocracia estatal.
En este país, se ha vendido el discurso que “pagar impuestos”, solo lo hacen las empresas y aquellos que tienen altos ingresos y realizan la declaración de renta, o sea de forma más técnica, impuestos de primera y segunda categoría, lo que es FALSO, en este país TODOS pagamos impuestos, que se pueden comer de partida MÁS del 30% de su ingreso bruto, aunque a Ud. le parezca difícil de creer ¿por qué?, bueno vamos contando:
1. Primero tenemos el IVA, el más conocido.
2. Pero debemos agregar el impuesto específico a los combustibles que TODOS pagamos, bien sea cargando combustible en los autos, pagando un pasaje, o pagando un kilo de pan… pues en el precio que Ud. paga.. ¡ADIVINE!.. está incluido el impuesto específico a los combustibles, por el transporte de los productos, o la propia preparación de este.
3. Luego el impuesto de timbres y estampillas.
4. El de contribuciones.
5. Los impuestos municipales.
6. Los impuestos específicos al tabaco.
7. A las bebidas alcohólicas, etc.
Con la correspondiente sinergia de los mismos, ¿y quien cree que termina pagando todos esos impuestos?, ¿algún pobre diablo que no se ha puesto a pensar en esto? pues es correcto, es USTED, y todos los demás los que pagamos la fiesta ¿ahora se ha puesto a pensar cuanto cuesta en verdad un kilo de pan? ¿quiere calcularlo?, apuesto que nunca imagino que cada mañana Ud. invita al Estado a desayunar, y ¿le dieron alguna vez las gracias?
La próxima vez que vea una protesta bien por más “beneficios” que pague el Estado o huelgas de empleados públicos, buscando más beneficios, tome aire, piense un poco, PIENSE (no duele ni toma mucho tiempo, y que Yo sepa ni mata ni mutila), y por favor ¡¡¡ACUERDESE QUE UD PAGA!!!, apuesto que ya no verá de forma tan simpática cada protesta.
Una frase para terminar, siempre recuerde que:
“LA POLITICA NO LUCHA POR TU ALMA, LUCHA POR TU BOLSILLO”.
Etiquetas: Corrupción Chile, Estado, Imbéciles, Impuestos
posted by Heitai at 9:43 a.m.
7 Comments:
Buen post, gracias por la mención. Me dejas publicarlo en mi blog? Siempre pongo un link a la entrada original.
No hay problema... claro que en lo personal no lo encuentro tan bueno jeje
Está bueno Heitai. Lo humildad es buena, pero para tanto.
El alcande Ossandón al preguntarsele si convenía bajar o eliminar el impuesto a los combstibles, le echó la culpa a la crisis del Medio Oriente.
En el sitio movimiento 10 de septiembre, contaban la siguiente anécdota. Un taxista gana $600000. Sin embargo, con el impuesto a los combustibles, al final recibe $300000, pues el Estado se lleva la otra mitad.
Ayyyy,.... Ossandón de nuevo?.. sabes? el aumento del precio de los combustibles no tiene mucho fundamento, Libia produce ligero, ese es el que más ha subido, pero la producción y exportación no se ha detenido. Es tanto especulación, como especulación.
Y lo del taxista es bien cercano a la realidad, aproximadadamente el 40% (por lo bajo) del ingreso bruto total del transporte de pasajeros es para combustibles, y más de la mitad de eso va a impuestos. Sabes? siempre se critica a las bencineras por el tema de las alzas y bajas, pero estas apenas marginan entre 10 y 40 pesos por litro de combustible, no es broma, es una realidad, pero de ese margen deben descontar todos los gastos... con suerte la utilidad puede ser de 5 pesos por litro... con suerte!
El estado dadivoso y justiciero es sólo un espejismo y muy costoso por lo demás.
La experiencia muestra muy claro que el rendimiento de cada peso adicional recaudado por el estado es decreciente.
En otras palabras, por cada peso que "La Bestia" arranca de nuestros bolsillos retorna una fracción cada vez más pequeña que casi siempre termina en los bolsillos de los grupos de poder.
Como dijo Buchi, a nadie un inspector le cobra el IVA, .... pero igual se lo cobran. Las personas olvidan que la plata que el Estado gasta, al final, no sale de las empresas o de un árbol mágico, sale en mayor o menor medida de sus sueldos.
Estos comentarios fueron publicados en Revista Júpiter, pero me parece una buena idea incluirlos en este sitio:
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karen mv (http://twitter.com/kamovas) dice:
marzo 9, 2011 a las 2:20 am
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son tan horribles los países que cobran altos impuestos y así alimentan el monopolio estatal
como Australia http://es.wikipedia.org/wiki/Econom%C3%ADa_de_Australia#Impuestos
Dinamarca (Dinamarca posee los impuestos más elevados del mundo, con un promedio alrededor de un 48% de impuesto por salario )
Canadá (http://www.canadaenespanol.com/impuestos_en_canada.htm)
por nombrar algunos, sobre todo que atrocidad la que cometen al pedir más impuestos a los que más ganan (siendo que ellos podrían ser quienes manejen el capital y crear empleos, de bajo ingreso eso si porque asi actuamos todos racionalmente)
no como USA q en su mayoria ni siquiera alcanzan al 15%
http://thesocietypages.org/socimages/files/2011/02/13.gif
ahora quizás alguien entienda esa imagen donde se ven indicadores de calidad de vida como indice de GINI, población penal, inseguridad alimentaria, entre otros.
El problema no está en los altos impuestos, sino en el tipo de organización que los maneja.
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Heitai dice:
marzo 10, 2011 a las 12:05 am
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Karen mv (o Karen mv.. no me quiero equivocar en el nick)
En tu último párrafo dices:
“El problema no está en los altos impuestos, sino en el tipo de organización que los maneja”
Pues ese es el problema… pones ejemplos concretos donde las burocracias funcionan de forma más menos, eficiente, pero el problema es que en la mayoría de los países el estado no es eficiente, te dejo los ejemplos de España (España tiene menos fondos para sus pensiones que Chile, con más del doble de población, además de vieja y un mayor ingreso PC), Inglaterra, Irlanda, Francia, que en la práctica son países quebrados… los países del Este de Europa, como Polonia, RepCheca (no es anormal el tener 2 trabajos, lo sé de primera fuente) o Lituania, no están convirtiendo sus economías en seguidoras de las economías que mencionas. Muy por el contrario, están desmontando los estados de bienestar heredados de los tiempos del comunismo, bien saben no son sostenibles en el tiempo. Cierto es que Australia es un excelente ejemplo, y si tuviéramos las virtudes cívicas de ese país, la carga impositiva no sería problema, pero Karen ¿crees que nuestros políticos la tienen? piensa en el próximo presidente del Senado y luego responde. En cuanto a Dinamarca, no le considero un ejemplo apropiado, ¿por qué? El tamaño de población es tan bajo, como el de una ciudad grande. En cuanto al otro ejemplo, Canadá, ese país tiene 2 cosas que nosotros no tenemos (aparte de virtud cívica), y esas dos características le colocan en una singularidad, primero su economía es una de las más abierta y competitiva del planeta y segundo, es exportador de energía, pues posee enormes yacimientos de petróleo y gas, esas características lo convierten en como ya dije, un singularidad.
Repito la pregunta ¿crees que no solo nuestros políticos, sino nuestra sociedad tienen las virtudes cívicas de esos países? Yo estoy seguro que no, y mientras sea así, no me gusta que las personas de menores ingresos paguen MÁS de un cuarto de su dinero en impuestos.
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