Mujeres a parir, viejos a morir

Hace rato que ya no le presto mucha atención a las noticias nacionales, me interesa más saber la conducta China en la crisis Coreana, el desarrollo de la guerra civil en Siria o sobre los movimientos independentistas en Escocia, que escuchar la misma cantinela patética, a que nos tiene acostumbrado la fauna política criolla, que viene a ser solo otra forma de describir a la sempiterna fronda aristocrática santiaguina, donde cambian los apellidos, pero sigue siendo lo mismo de siempre.

¿Le parece extraño que haga referencia a un expresión de la izquierda, como "la fronda"?, pues no lo es tanto, ya que si piensa con atención, y recuerda como son las cosas, la expresión más que referirse a un grupo específico, tiende a señalar la mentalidad provinciana, inmovilista y estatista de la clase política. Acá no es reino de Thatchers, o Churchills, este es el reino de mediocres piñeras (salvo uno), bachelets, lagos (y el hijito de ladrón), etc. Lo he dicho antes, y no he sido el único, Chile no es hijo de mayorías, ni de muchedumbres, Chile es hijo de hombres con Nombre y Apellido, y de instituciones sólidas y permanentes. Nunca esta demás recordar, que antes de existir un Chile, había un Ejército de Chile, imagino que son pocos los países, si es que hay, dónde su Ejército, y por extensión, sus instituciones militares, son más antiguas que el propio País. Y una de las cosas patéticas, sobre nuestra simiesca sociedad, es que muy pocos saben esto.

Tiendo a pensar, en esta "fronda", como una especie de "Agujero Negro", que tiende a tractar todo y a todos a una mediocridad e inmovilismo, en términos coloquiales, a nivelar hacia abajo, a cortar las alas a quien quiera volar. Los "si pero", "como se te ocurre", "no va a resultar", "eso esta bien para otros lados", y un gran etc, que cada uno de nosotros podría completar sin demasiado esfuerzo.

Sin embargo, la realidad es complicada, es cosa de ver esas viejas películas chilenas en blanco y negro, y darse cuenta, que muchos de nosotros, no somos así, no nos identificamos con esos personajes, esas actitudes, somos muy distintos. La eterna nostalgia zurda, por los años en que todo estaba bien, no pasa de ser un estúpido mito, menos válido que el Trauco, o el Cuero, y por lo menos, estos últimos más entretenidos. Y no solo es complicada, desde el punto de vista personal, lo es igual desde el punto de vista social. Hay cosas que pueden ser y otras que no, cosas que son posibles y otras no (a mi me gustaría volar con el pensamiento,... pero no, eso si que NO se puede... aún jeje). Chile no es el de 1970, el Chile imaginado en las cabezas de todos los políticos, por la izquierda el Chile soñado, y por la desecha, el Chile con el que les han lavado las pocas neuronas que tienen. Chile es otro. De partida, como ya dije mucho antes que el patético gobierno de piñata, nos falta un millón de niños, y eso, solo eso, cambia el futuro, y aunque no lo crean, destruye los sueños zurdos. No es lo único, tenemos tantos tratados de libre comercio, con tantos países, que cambiar las reglas del juego por estos lados, es decir andar estatizando empresas, estatizando la economía, NO es posible. Algo de inteligencia se filtró en dichos TLC, así que, salvo quieran convertir a este país en un paria peor que Corea del Norte, nada puede cambiar el modelo, si antes no se renegocian los TLC, y eso, sí que "no va a resultar".

Ahora bien, por cierto hay un modo, uno fácil y bonito, para que todo funcione como antes, para el paraíso en la Tierra, para todas las tonteras y desvaríos zurdos, y se resume en el título de este post, pues si la izquierda quiere su paraíso:

Mujeres a parir,
viejos a morir,
hombres a producir.

Ese es el camino de la solución zurda, todos los demás son solo cantos de Sirena, esa es la única solución para llevar a delante los ideales zurdos, y por su propia naturaleza irracional, esta condenada al fracaso. La esclavitud desapareció de la Tierra (salvo en Cuba), las izquierda, tarde o temprano igual.